Todos hemos pasado por esto. Sofás que no encajan, acabados poco prácticos de los que te arrepientes a los pocos días de la reforma, colores que se ve totalmente diferente a la muestra que viste. En este post de hoy vamos a identificar 3 errores comunes en el diseño de interiores y discutiremos algunas formas de evitarlos. Pensar por adelantado y saber darle el mejor enfoque te puede ayudar a ahorrar un tiempo considerable, dinero y dolores de cabeza. ¡Vamos a ello!
En primer lugar, es importante reconocer que todos somos humanos y que equivocarnos está a la orden del día. De nada sirve estar cuestionándose o lamentándose de decisiones pasadas, así que trata de llevarlo lo mejor que puedas. Incluso muchos diseñadores de interiores experimentados tienen que pasar por aquí en algún momento de su carrera. Para el no profesional, los errores son demasiado fáciles de cometer, especialmente cuando se toman decisiones apresuradas. Mientras que algunos problemas son fáciles de resolver, otros pueden ser extremadamente caros y llevar mucho tiempo rectificarlos.
Este es el error más común y frustrante de todos. Es un error que se comete con demasiada frecuencia, ya sea en espacios atestados de muebles extremadamente grandes que terminan comiéndose el espacio o en locales que se sienten desesperadamente vacíos. A veces, los muebles son tan grandes que el primer problema viene al meterlos en el local. En otras ocasiones, los muebles pueden ser tan pequeños e insignificantes que difícilmente consiguen causar algún impacto.
Al seleccionar muebles para profesionales, es importante conocer las dimensiones del espacio a la hora de adquirir cualquier tipo de muebles. Si compramos muebles sin haber medido antes el espacio del que disponemos puede ser que compremos una pieza demasiado grande.
Algunos de los hoteles o restaurantes con los que hemos trabajado tienen la suerte de ser lo suficientemente grandes como para poder albergar piezas de mobiliario de un tamaño considerable, otros desgraciadamente no. Es importante, sin embargo, recordar que la proporción lo es todo y que la escala de tus muebles debe ser la apropiada.
El mejor consejo que podemos darte es que te hagas amigo/a de la cinta métrica. Lo mejor que puedes hacer es comprobar las medidas de manera rigurosa antes que atreverte a hacer suposiciones que podrían llevarte a consecuencias desastrosas. Medir todo a fondo y de una manera exhaustiva no solo te ayudará a determinar si los muebles caben a través de la puerta, sino que también te dará una idea de cómo llenará el espacio. Incluso podrías hacer una maqueta de un plano del espacio del que dispones para tener un dibujo más preciso del espacio que ocupará cada pieza.
Para restaurantes realmente pequeños, no seas demasiado ambicioso con la cantidad de sillas y mesas. Trata de ser realista. Probablemente pueda ser difícil sentar a 10 o 12 comensales, así que puedes optar por un sofá principal y compleméntalo con algunos sillones.
Conseguir el color correcto de la pintura para tu hotel o restaurante es un tema tan grande que se podría escribir un artículo entero sobre ello.
La clave para evitar este error común es conocer tu espacio y el objetivo general. Los colores de la pintura se alteran significativamente dependiendo de la dirección de la habitación, el color de la luz (dependiendo de si se usan bombillas calientes o frías), o la hora del día. Por este motivo, hay que tener un objetivo claro antes de aplicar cualquier color.
¿Deseas crear un acogedor ambiente nocturno o un espacio luminoso y fresco? Una vez decidido, explora los distintos colores disponibles que te den la posibilidad de crear ese ambiente que deseas.
Te recomendamos invertir en algunos botes de pintura de muestra para aplicarlos sobre alguna pared a modo de prueba en lugar de fiarte al 100% de las muestras impresas. Aplica dos o tres capas finas, como lo harías en su pared, dejando que la pintura se seque completamente entre cada una. Esto te dará una visibilidad clara y te ayudará a tomar la decisión correcta. Si ninguna cumple con los requisitos, sigue tu instinto o explora más colores de la misma forma.
¡La planificación lo es todo!
La disposición de los muebles para restaurantes u hoteles es increíblemente importante y puede cambiar significativamente el aspecto de tu local. Si se hace mal, el espacio puede parecer demasiado desordenado o vacío.
La disposición incorrecta puede ser resuelta a menudo gracias a cambios sutiles que pueden solucionar el problema. Sin embargo, para espacios que tienen accesorios permanentes, las malas elecciones de distribución son potencialmente mucho más perjudiciales.
Te recomendamos crear un plano que pueda ayudarte a la hora de distribuir el espacio de manera correcta. No es necesario que sea un dibujo detallado hecho con AutoCAD. Puedes incluso dibujar un plano rápido a escala y recortar trozos de papel para los muebles principales.
La funcionalidad debe ser clave al planificar el diseño. Si se busca crear un espacio sociable, un lugar para el entretenimiento, considera agrupar los muebles de forma propicia para este propósito.
Los sofás colocados de cara permitirán a los invitados conversar cómodamente. Lo ideal es una mesa de café central para aperitivos y bebidas o una zona de bar con taburetes para tomar algo rápido o esperar a que una mesa quede libre.
Es fundamental también considerar las áreas de acceso, ¿hay suficiente espacio para que los clientes circulen? Lo ideal sería que siempre hubiera al menos 1 m de espacio libre para que los clientes puedan moverse de manera cómoda por el local.
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