Pensar que la decoración estilo retro sólo tiene que ver con lo antiguo y no con lo nuevo puede inducir a un error bastante común. Los espacios decorados al estilo retro permiten una yuxtaposición sincronizada de lo antiguo con lo nuevo. Es por ello, por lo que este tipo de decoración con mobiliario de distintos colores, texturas y líneas se mantiene vigente hasta hoy en día.
Diferencia entre el estilo vintage y retro
Cuando hablamos de estas dos tendencias decorativas solemos tratar de sinónimos. No obstante, a pesar de ser dos estilos similares, tienen un matiz importante que los diferencia.
La diferencia clave radica en que el estilo vintage está compuesto por elementos decorativos y mobiliario propio de la época. Esto es, si un sofá es vintage es porque fue diseñado y fabricado en la época que no es la actual.
En cambio, en el estilo retro se utilizan los objetos que se inspiran en decoración vintage siguiendo patrones de decoración “antiguos” pero fabricados en la época actual. Así se puede decorar un espacio al estilo danés de los años 50 con texturas modernas y actuales. Por ello, esta mezcla ideal de lo nuevo y lo vintage es tan querida por los diseñadores e interioristas de la actualidad.
Características de la decoración estilo retro
Entre sus características nos encontramos ante un “boom” de diseños y colores. Tanto las tonalidades pasteles como los colores fuertes son propios de la decoración retro. Dependiendo de la época en la que está inspirado el mueble u objeto decorativo nos podemos encontrar ante un sillón amarillo o un jarrón beige.
Es propio ver mezclas de texturas como sillas de cuero y metal o sillones de lana y madera. También se hace uso de estampados geométricos.
Mobiliario en la decoración estilo retro
Como ya te hemos comentado antes, el mobiliario retro es aquel que se ha inspirado y diseñado según patrones de una determinada época, pero ha sido fabricado en la actualidad. No obstante hay ciertos modelos tan comunes en este tipo de decoración que no podemos no mencionarlos.
Sofá Chester
Un clásico en todos los sentidos. Actualmente el sofá Chester lo usan tanto en decoración de eventos como de salas de espera para aportar una pieza retro que no tiene comparación.
Taburetes estilo retro
Los taburetes altos y bajos son claves en un bar o restaurantes en los que se quiere conseguir una atmósfera retro. Situados en torno a una barra son el centro de atención y el nexo necesario para unir lo moderno con los vintage.
Sillas estilo retro
En cuanto a sillas tanto de hogar como de hostelería, el estilo retro da libertad a la combinación de sillas de diferente tipo e, incluso material. Puedes combinar una silla de metal y cuero con otra de plástico, siempre teniendo en cuenta sus diferencias.
Puffs
Esta pieza de mobiliario siempre ha sido un elemento decorativo que se adapta perfectamente a uno u otro estilo. Puede que por su flexibilidad siga siendo popular entre los decoradores a la hora de hacer una composición de interiorismo.
Los puffs han estado reinventándose y por ello es posible crear una estancia retro tanto interior como exterior. Los puffs tumbona son útiles y aportan un toque chic al resto de decoración.