¿Seguro que vas a deshacerte de esa antigualla? No es que pretendamos promover ningún síndrome de Diógenes, pero cualquier útil o mueble, por raro y desvencijado que parezca, puede ser susceptible de ser recuperado, restaurado o convertido en algo bien distinto. De ahí que sea necesario pensárselo dos veces antes de arrojar algo al cubo de la basura. Frente a la filosofía consumista a usar y tirar se impone, cada vez con más fuerza, la del reciclaje y lo DIY (del acrónimo inglés ‘Do it yorurself’ o ‘Hazlo tú mismo’), sobre todo en el ámbito de la decoración. Lo que comenzó como una moda más, auspiciada por el contexto de crisis y la necesidad de ahorro, ha pasado a marcar tendencia hasta convertirse en todo un arte en el marco del diseño de interiores.
Y es que la pareja reciclaje-decoración rezuma imaginación, creatividad y originalidad, con lo que su presencia permite crear ambientes únicos, ya sea en la terraza, el dormitorio o cualquier otra estancia de la vivienda. La búsqueda incesante de espacios con personalidad y calidez ha provocado que el interiorismo recurra con frecuencia a los muebles reciclados para marcar la diferencia a través de piezas tan singulares como personales.
No en vano las posibilidades de este tándem es tan amplio como materiales y diseños quepa imaginar. La magia del reciclaje da una segunda oportunidad a objetos de lo más variopintos: unos neumáticos pueden transformarse en una bonita mesa e incluso en inspirador lavabo, unas latas en encantadoras macetas y, por imposible que parezca, hasta el envoltorio de las magdalenas puede llegar a iluminar como lámpara DIY. Cualquier cosa es susceptible de convertirse en un ornamento bien diferente.
El reciclaje no solo permite una decoración ‘low cost’ o la renovación de interiores sin necesidad de obras. Puede llegar a convertir la reutilización en un arte dando lugar a piezas con ‘alma’. Su uso traspasa, además, las estéticas rústica, vintage o industrial para formar parte de cualquier tipo de estilo: desde el chill out al nórdico pasando por los ambientes eclécticos. No hay límites para el reciclaje en la decoración. Os mostramos 5 de los objetos y materiales más versátiles a la hora de metamorfosearse:
1. Muebles de palets
El reciclaje de palets encabeza la lista, dada la variedad de piezas que pueden surgir de sus listones de madera: sofás de palets, mesas de palets, tumbonas de palets, jardineras de palets, etc. Por su propia estructura, los palets permiten crear mobiliario para cualquier espacio. En Fiaka Ambient también hemos diseñado nuestra propia línea de mobiliario de palets dadas sus amplias posibilidades en interiores y exteriores.
2. Abriendo puertas
Cuando se cierra una puerta, se abre una ventana. El dicho popular también es aplicable a la decoración cuando optamos por dar una segunda oportunidad a una vieja puerta. De su reutilización puede surgir mobiliario tan bonito como variado.
3. Stairs to heaven
No solo en el tema de ‘Led Zeppelin’ las escaleras llevan al paraíso. También las viejas escaleras de mano pueden conducir a espacios realmente inspiradores.
4. Cajas de madera
Ya sean de forma individual o apiladas, las cajas de madera no solo son susceptibles de cumplir su función como espacio de almacenaje. También pueden transformarse en mobiliario con encanto.
5. Bobinas de cables
Sin apenas esfuerzo -basta con un poco de lija y una mano de pintura para tratar la madera- las bobinas de cables pueden transformarse em mesas y sillas ideales para interiores industriales, vintage o rústicos.