“Menos es más” este es el lema que defendía el arquitecto Miles Van Der Rohe, quien dirigió la Bauhaus entre 1930-1933. La menor cantidad posible de muebles es norma estricta, y olvídate de llenar estantes y otras superficies con objetos inútiles.
La elegancia de este estilo decorativo está basada precisamente en enseñar los espacios casi desnudos, con pocos muebles, pocos colores… La apuesta es por una decoración sencilla donde el mobiliario sea liviano, práctico y de líneas rectas. Los espacios amplios, luminosos y altos son excelentes para implantar el estilo minimalista ofreciendo una sensación de amplitud, limpieza y paz.
En cuanto a colores, son imprescindibles los tonos neutros, jugando con todos los elementos del espacio para conseguir una monocromía.
El mobiliario en el estilo minimalista se decanta por formas geométricas, líneas rectas y materiales nobles. Toman presencia muebles con poca altura y mayor anchura.
Los textiles que incorporemos en el espacio, también tienen que seguir las pautas de este estilo, por lo que cortinas y alfombras han de ser sobrias y con tonalidades neutras, yendo en armonía con el resto del espacio. Incluso intentando combinarlas con el sofá.
Para la terraza o jardín el mobiliario Chill Out es el más adecuado para completar la decoración con estilo minimalista también en el exterior.
Los adornos también pueden integrarse en este tipo de decoración, lo que tenemos que procurar es que los colores combinen con el resto de elementos pero que destaquen de manera única sin romper con la monocromía del espacio.
