El estilo Art Decó es sinónimo de lujo, glamour y exotismo en el mobiliario. Caracterizado por cortes geométricos y líneas curvas.
El art decó deja a un lado la sencillez, pretende destacar. Usa el color, el brillo y nuevos materiales. Colores crudos en las paredes, a menudo en acabados brillantes.
Uso de técnicas de pintura decorativa como el punteado o trapeado para dar un efecto distinto a la pintura de las paredes.
Es habitual el terciopelo, las moquetas, y el cuero como elementos comunes en la decoración.
Los muebles con esquinas redondeadas, curvas y de grandes proporciones. Maderas exóticas. Lacados brillantes inspiración muebles chinos.
En cuanto a colores, se utilizan tonos fuertes como el rojo, el amarillo, los rosas, verdes y azules. Y mezclas con negro, plata, cromado.
Alfombras con dibujos geométricos y telas con diseños geométricos o motivos inspirados en Egipto o los aztecas.
Aparte de madera se usan materiales como el acero inoxidable, el aluminio, la piel de cebra, el lacado, el mármol y cualquier otro material que destacara por su innovación y elegancia.
Uso de los espejos en la decoración y de de luminarias y de linóleos o azulejos en bicolor blanco y negro.
Combina acabados en cromo y vidrio que aportan luminosidad.