Las primeras lluvias nos recuerdan que el otoño ya está aquí. La naturaleza empieza a cambiar los tonos verdes por los amarillos y ocres propios de esta estación que pronto cubrirá de alfombras de hojas secas el suelo.
También la decoración chill out se viste de otoño. Aunque normalmente este estilo se asocia a la primavera o verano, cuando el buen tiempo invita a disfrutar de los exteriores y la noche, cualquier estación es buena al abrigo del confort asociado a esta estética. Mejor aún si se hace en en compañía de una chimenea, dejando que el sonido de la lluvia sirva de música ambiente y la tierra mojada de aroma natural. Solo es cuestión de seguir breves consejos para tener un otoño chill out en el interiorismo del hogar o de los locales.
Colores: El blanco, característico en la estética chill out, se puede combinar con otros colores propios de este estilo que recreen un ambiente más otoñal, como los tonos tierra, marrón, ocres, anaranjados, marfil y lila. La pareja blanco y madera, al igual que en verano, ofrece muy buenos resultados, con independencia de la estación.
Iluminación: como bien sabéis, la iluminación chill out requiere luces tenues y suaves que inviten a relajarse creando un ambiente íntimo y acogedor. Para dar un aire otoñal, recurriremos a las velas, elementales para este estilo. Ya en anteriores post recogíamos algunas ideas para diseñar portavelas reciclados con un aire chill out. Igualmente, los farolillos, faroles, las lámparas de estilo árabe o aquellas que permiten graduar la intensidad de la luz, además de los leds pueden ayudarnos a crear este tipo de ambiente acogedor y relajante.
Si no disponemos de lámparas que permitan regular la intensidad de la luz, podemos recurrir a gasas de color para moderarla. Jugar con la iluminación para cambiar la tonalidad del local o estancia, de modo que predominen los tonos ocres, anaranjados, etc. puede dar un toque melancólico y cálido, más acorde con el otoño.
Para aprovechar las noches sin lluvia, en terrazas exteriores es posible recurrir a lámparas de fuego (las hay de muchos tipos) que, además de iluminar, decoran y dan calor cuando cae el sol.
Alfombras, cojines, puf gigantes y almohadones: Podemos escogerlos lisos, con estampados o a rayas, procurando usar tonos acordes con los ambientes chill out, en los que se busca el relax, la paz y tranquilidad. Aquellos con motivos lounge, árabes o Feng Shui combinan muy bien con la decoración chill out.
Muebles: en general usaremos pocos muebles, bajos, de líneas rectas y suaves. A la hora de escoger mobiliario para una decoración chill out debemos tener en cuenta la máxima minimalista: menos en más. Sugerimos mesitas auxiliares, hechas de material reciclado como palés o troncos, y puff de distintos estilos, ya sean soft – tanto cúbicos como cilíndricos- o rígidos –también con formas cuadradas o redondas. Las sillas butterfly o BKF en tonos cálidos, los divanes y arcones, además sillones acordes con este estilo resultan cómodos, funcionales y muy estéticos para dar un toque elegante al estilo chill out en otoño.
Debemos tener en cuenta que también en tiempo de crisis es posible renovar el mobiliario para escogerlo más adecuado a este estilo sin necesidad de gastar mucho. En otros post hemos hablado de decoración chill out a precios reducidos. En la página de Fiaka podéis encontrar, asimismo, un amplio catálogo de ofertas en muebles chill out.
Textiles: Si disponemos de mobiliario en tonos fríos, aprovechando la llegada del otoño, podemos usar textiles en tonos tierra y cálidos sobre parte de su superficie para dar sensación de calidez. Las fundas de lana sobre los puff suelen ser muy recurrentes en esta estación. Del mismo modo, podemos utilizar cortinas y estores con tejidos otoñales y telas de tonos cálidos.