Los nuevos tiempos piden nuevos canallas. Ante el avance de la frialdad, de la tecnocracia, la tecnología y las cifras, resurge el modelo algo bohemio, pícaro y dandy, quizás también ‘bon vivant’, que sonríe de una forma particular. Para ese tipo de canallas, chicos y chicas, es la ropa moderna que hace la firma andaluza Sonrisa Kanaya, que está en plena expansión. Hemos hablado con su creador, Antonio Ariza, tras haber diseñado para sus tiendas taburetes, puffs y sofás a medida personalizados y adaptados a la decoración de sus locales, abiertos en Málaga y Granada.
«Para nosotros la decoración de locales y cafeterías es un punto principal, ya que necesitamos que transmita todo aquello que nos define, sin dejar de lado que sea un lugar agradable, cómodo y que invite a todos los Kanayas a querer pasar tiempo con nosotros. Todo esto jugando con una decoración atrevida, ya que no hay muchos sitios donde puedas tomarte un café sentado en un wc o compartir una noche de tapas con tus amigos metido en una bañera. Todos estos elementos hacen que la experiencia en Sonrisa Kanaya sea, como poco, una experiencia diferente para todos nuestros clientes«, nos cuenta el emprendedor.
Lo que nació como un proyecto de moda en Córdoba ha acabado convirtiéndose en un proyecto más amplio con sede oficial en Málaga y Granada, y presencia en las mejores tiendas multimarca andaluzas. «Y esto no ha hecho más que empezar», afirma Antonio. «Nuestro objetivo principal es conseguir implantarnos dentro del panorama actual de la moda juvenil aportando, más que un simple producto, un modo de ser, una manera de actuar. Para conseguir llegar a este punto estamos en continua colaboración con diferentes instituciones y celebrando fiestas Kanaya por varios puntos de Andalucía para conseguir llegar a toda esa gente que está esperando conocernos y sacar el Kanaya que lleva dentro». Nosotros, Fiaka, que tenemos sede en Granada, damos fe de que cada vez hay más jóvenes con una sonrisa en la ropa o en su bolsa. Se está expandiendo como una marca de identidad.
Pero, ¿en qué consiste esa filosofía? «En ser feliz en la vida y mostrarlo a la gente transmitiendo esa energía positiva con una sonrisa como carta de presentación. Despertarte cada mañana con una sonrisa en la cara y otra en la camiseta. Desde nuestros comienzos definimos a Sonrisa Kanaya como es esa sonrisa que se dibuja en tu cara cuando logras tus metas, cuando alcanzas los objetivos que a toda costa persigues. Como cuando por fin cruzas la mirada con esa persona que hace tiempo que te gusta y descubres que es recíproco. Todos esos momentos que te arrancan una sonrisa son la filosofía que Kanaya quiere transmitir», detalla su creador.
Esa filosofía de identificación viene acompañada de un logotipo Kanalla sencillo y fácil de recordar, una sonrisa cómoda y discreta, algo bufona y desenfadada, con un punto de descaro. Para una línea de ropa que quiere crear algo más que una marca es fundamental contar con un logotipo que acierte de lleno en su proyecto, se reconozca y se identifique con lo que se quiere transmitir (ejemplos míticos: Lacoste, Adidas, Fred Perry…). En este caso, la Sonrisa Kanaya es esta. Búsquenla en la calle.